El cordón umbilical es una de las partes más características a la par que sensibles de un recién nacido. Durante el embarazo, este cordón conecta al bebé con la placenta, permitiéndole recibir oxígeno y nutrientes esenciales para su desarrollo. Sin embargo, una vez que el bebé nace, el cordón umbilical pierde su función y se corta, dejando un pequeño muñón que requiere cuidados especiales. En este post, te explicamos cómo cuidar adecuadamente el cordón umbilical del recién nacido para asegurar que caiga de manera natural y sin complicaciones.
Partes del cordón umbilical. ¿Qué es el muñón del cordón umbilical?
El cordón umbilical está compuesto por tres vasos sanguíneos: dos arterias y una vena, rodeados por una sustancia gelatinosa llamada gelatina de Wharton. Tras el nacimiento, el cordón se pinza y corta, dejando lo que se conoce como el muñón del cordón umbilical, que es la parte remanente que queda adherida al ombligo del bebé. Este muñón umbilical, al no tener ya función, se seca y se cae de forma natural en las primeras semanas de vida del bebé. Durante este proceso, es fundamental mantener el área limpia y seca para evitar infecciones.
¿Cómo cuidar y cuándo se caerá el muñón del cordón umbilical?
El cuidado del cordón umbilical es sencillo, pero debe hacerse con atención para evitar complicaciones. A continuación, te compartimos algunos consejos clave:
- Mantén el muñón seco y limpio: es importante no sumergir al bebé en agua hasta que el muñón haya caído. En su lugar, se recomienda hacer baños de esponja suaves, como los que puedes encontrar en nuestro artículo sobre consejos para bañar a tu bebé. Tras el baño, asegúrate de secar bien el área sin frotar.
- Evita cubrir el ombligo con el pañal: pliega el pañal por debajo del muñón para que quede al aire, favoreciendo su secado natural.
- Aplica una loción suave para bebés si es necesario: si la piel alrededor del ombligo se ve seca, puedes aplicar productos adecuados como la Loción Baby de Denenes, que ayuda a mantener la piel hidratada sin irritar el área sensible.
En cuanto al tiempo en que el muñón caerá, generalmente sucede entre 7 y 14 días después del nacimiento. Durante este periodo, es normal que el muñón cambie de color, volviéndose marrón o negro antes de desprenderse por completo.
Síntomas de infección en el muñón
Aunque la mayoría de los casos no presentan problemas, es importante estar alerta ante posibles señales de infección. Algunos de los síntomas que indican la presencia de una infección en el muñón incluyen:
- Enrojecimiento o hinchazón alrededor del área umbilical.
- Mal olor proveniente del muñón.
- Supuración de pus o líquidos.
- Fiebre o incomodidad notable en el bebé.
Si observas alguno de estos síntomas, es recomendable consultar a un pediatra de inmediato para recibir el tratamiento adecuado para cuidar y limpiar el cordón umbilical El cuidado diario del cordón umbilical es crucial para evitar complicaciones. Además de los pasos mencionados anteriormente, te ofrecemos algunas sugerencias adicionales para mantener el área limpia y segura:
- Usa productos suaves y específicos para bebés: al limpiar el área, utiliza productos diseñados para la piel delicada de los recién nacidos, como el Gel Champú Baby, que limpia suavemente sin irritar el área umbilical.
- Evita la fricción: asegúrate de que la ropa del bebé no roce o presione el muñón. Opta por prendas sueltas y de algodón que permitan que el área respire.
- No apliques alcohol ni otros productos sin indicación médica: antes se recomendaba el uso de alcohol para secar el muñón, pero en la actualidad, muchos pediatras aconsejan dejarlo secar al aire, a menos que el médico indique lo contrario.
Consejos para cuidar y limpiar el cordón umbilical
El cuidado adecuado del cordón umbilical es crucial para prevenir infecciones y asegurar su caída natural, de forma segura. Mantener el área limpia y seca es fundamental, al igual que evitar cualquier tipo de fricción o irritación. Aquí te ofrecemos algunos consejos prácticos para mantener el cordón en buen estado durante este proceso.
- Mantén el área seca: evita sumergir al bebé en agua hasta que el cordón se haya caído. En su lugar, limpia al bebé con una esponja y seca el área suavemente.
- Limpia con productos suaves: utiliza productos diseñados para la piel sensible del recién nacido, como el Gel Champú Baby de Denenes, para mantener la piel limpia sin irritar el área del cordón.
- No cubras el muñón: pliega el pañal por debajo del ombligo para permitir que el muñón se seque al aire libre y evita frotar la zona al vestir al bebé.
- Usa lociones adecuadas: si notas que la piel alrededor del cordón está seca, puedes utilizar productos como la Loción Baby de Denenes, que hidrata la piel sin dañar el área delicada del muñón.
El cuidado del cordón umbilical, un paso esencial en los primeros días
Cuidar el cordón umbilical del recién nacido es una tarea sencilla pero vital para asegurar que el proceso de cicatrización ocurra de manera correcta. Mantén el área limpia, seca y vigilada para evitar complicaciones. Y si eres madre primeriza, te invitamos a leer más sobre consejos prácticos para madres primerizas, donde encontrarás más información útil para los primeros cuidados de tu bebé.