Saber cómo dormir a un bebé no es fácil. A menudo esto está asociado a la experiencia, pero en otras ocasiones tiene que ver con el sentido común, la paciencia y los buenos hábitos. Y la recompensa merece la pena: un bebé que descansa bien por la noche es una auténtica bendición para sus padres, pues genera bienestar al pequeño y a los adultos que le rodean. En cambio, quienes no lo logran sufren el efecto contrario: el cansancio del bebé y de los padres el resto del día, que puede derivar en irritabilidad, baja productividad en el trabajo y otros problemas personales o de pareja. Por suerte, hay pequeños detalles que pueden ayudar a tu hijo a conciliar mejor el sueño: aplica estos consejos para dormir a un bebé y seguro que tendrá pronto una gran mejoría en este importante aspecto de su vida.
Consejos para relajar a nuestro bebé
Antes de enumerar algunos sencillos consejos para dormir a un bebé, conviene recordar que cada pequeño es un mundo: lo que puede ir bien en unos puede no funcionar en otros. Por ello, es importante conocer bien a nuestro hijo: comprender qué señales nos indican que está cansado, qué actividades pueden favorecer su descanso nocturno, cuántas horas de sueño suelen ser suficientes para él, etc. Por supuesto, nadie tiene una varita mágica para conocer estos detalles a la primera, pero seguro que lo conseguirás con una buena dosis de observación y un poco de prueba-error, incluso en una tarea tan complicada como dormir a un bebé recién nacido en pleno llanto.
Establece una rutina para dormir
“Rutina, bendita rutina”. Esa es una frase que se puede aplicar a prácticamente todo lo relacionado con tu bebé. Y el sueño no es una excepción. Por tanto, trata de que siempre se acueste a una hora parecida y tras seguir unos pasos relativamente similares, por ejemplo en lo relacionado con el baño, la cena y otros cuidados antes de ir a la cama, como un masaje. También debes mantener esa rutina en lo relacionado con las siestas: alargarla o atrasarla puede implicar mayores dificultades para conciliar el sueño por la noche, pero acortarla o adelantarla puede hacer que llegue demasiado cansado a esa necesaria rutina para ir a dormir.
Comodidad, en todos los sentidos
Como a cualquier adulto, el bebé conciliará más fácilmente el sueño si se siente cómodo. Y en eso entran en juego muchas cosas. Por supuesto, el colchón de la cuna, en el que se tiene que sentir a gusto. Pero también el pijama y la ropa de cama, que no solo deben ser suaves al tacto, sino también adecuados a cada momento: ligeros en verano y cálidos en invierno pero sin llegar a agobiar. También deberás evitar detalles que puedan incomodarle, como piezas elásticas que le opriman las muñecas o los tobillos.
Música y luces para generar tranquilidad
La tranquilidad es un estado que se puede considerar el preludio del sueño. Y para muchos, no hay nada como relajar a un bebé con la música. Al principio de la noche, puede ser una nana cantada por sus padres y más adelante se puede pasar a la música para bebés, que encontrarás en muchos de sus juguetes o en cualquier reproductor. Puede ir acompañada, por qué no, de luces, siempre que éstas sean tenues y, si tienen movimiento, que sean suaves, en sintonía con la música.
A la cuna, somnoliento y con cuidados razonables
Sin duda, la verdadera aspiración que te debes marcar es que tu bebé se duerma solo. De lo contrario, será inevitable tener un cierto sentido de ‘esclavitud’ durante la conciliación del sueño. Y para que ello ocurra, deberás acostumbrarle a que lo consiga. En esa misión es importante llevar al bebé somnoliento a la cama, pero despierto, y que ese momento mágico de caer dormido lo consiga en la cuna. Y una vez lo haya logrado, deberás ofrecerle los cuidados que razonablemente necesite si se despierta, según su edad: si ya tiene bastantes meses o incluso más de un año, podrás hacerle sentir que estás ahí, pero quizás no resulte conveniente estar con él a cada momento o toda la noche. Pero si lo que buscas es cómo dormir a un bebé recién nacido, puede que mecerlo en tus brazos sea una buena y necesaria solución al comienzo, así como tenerlo en su moisés junto a ti en el dormitorio.
Denenes ayuda a conciliar el sueño de tu bebé
Para concluir, te damos un último consejo que también ayudará a tu pequeño a conciliar el sueño: utilizar los productos de la gama Felices Sueños, tanto en el baño como después de ese relajante momento. Denenes Felices Sueños está eco-enriquecida con lavanda, refuerza las defensas de la piel ayudando a su óptima maduración y favorece el descanso de los más pequeños.